El Camino de Guadalupe lleva a los peregrinos al encuentro con Dios, de la mano de la Virgen María, por las faldas de la cumbre más bella de México: el Pico de Orizaba.

¿Qué ofrece el Camino de Guadalupe? De todo….

  • Una experiencia de encuentro con Dios y con la Virgen María
  • Paisajes bellísimos y contacto directo con la naturaleza en las faldas de la cumbre más alta de México
  • Rutas y senderos increíbles y retadores para los amantes del senderismo y el ciclismo de montaña
  • Arte: Actualmente hay 12 imágenes monumentales de la Virgen de Guadalupe, auténticas obras de arte
  • Gente buena, campesinos muy trabajadores y hospitalarios
  • La oportunidad de descansar, reflexionar y encontrarte contigo mismo

Prepárate para recorrerlo de la mejor manera posible:

1. Elige la ruta que más te convenga. Actualmente puedes caminar desde 5 km. hasta 50 km., dependiendo del tramo que elijas. Hay 12 estaciones. En tu próxima peregrinación podrás elegir otro tramo, pues el camino alcanzará los 100 kilómetros, con 25 estaciones. Planea tu camino según se ajuste a tu condición física, a tus intereses y al modo en que quieras hacerlo: a pié, en bicicleta de montaña o en coche.

Puedes servirte de Google Maps para elegir tu recorrido:

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2. Instrúyete sobre el acontecimiento guadalupano. Pueden servirte los videos y los libros del Instituto Superior de Ciencias Guadalupanas:

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3. Invita a buenos amigos a hacer el Camino contigo.
4. Elige el equipo adecuado. Asegúrate de llevar botas de senderismo cómodas, ropa de abrigo, un impermeable, un sombrero, y una mochila ligera.
5. Si vas a hacer tu peregrinación en bicicleta de montaña, prepárate físicamente. El Camino de Guadalupe en bicicleta es un recorrido exigente: si partes de La Perla, tiene 1800 metros de ascenso, por lo que tal vez quieras partir de Macuilaca Grande o hacerlo en dos días.

6. Relájate y disfruta del viaje. El Camino de Guadalupe es una experiencia única que puede cambiar tu vida. Así que relájate, vive al máximo cada momento, disfruta los paisajes más bellos de México. Tómate el tiempo de contemplar las montañas, los bosques, las flores, los cultivos, las aves y los rebaños…; goza la brisa pura del campo, gusta el silencio, agradécelo todo, alaba al Creador, siente la mano de María que te acompaña.

7. Sé amable y respetuoso con los lugareños y los demás peregrinos; haz nuevos amigos. Aprenderás mucho de las personas que habitan las comunidades de las faldas del volcán, de su bondad, hospitalidad y profunda religiosidad.
8. Entra a las capillas de las comunidades que atraviesas y visita a Cristo Eucaristía. Él está allí esperándote en el Camino, como lo hizo con la mujer samaritana (Jn 4…)
9. Detente con toda calma en cada Plaza de Guadalupe; contempla las imágenes, entra en relación personal con nuestra Madre Santísima que está en el cielo.

10. Llegando al Jardín de Guadalupe, en El Minero, tómate tu tiempo para estar a solas con Dios y con la Virgen María. En el lugar encontrarás sugerencias prácticas para vivirlo al máximo.
El Camino de Guadalupe es una experiencia única que puede cambiar tu vida. Es un viaje que recordarás para siempre.

Una oportunidad de conversión por el camino de la belleza. una invitación a descubrir la esencia del evangelio, que es fe, devoción, sí; pero sobre todo: amor a Cristo hecho obras.

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